Antes que nada, leí un par de artículos hoy, que me parecieron muy interesantes. este y este más, es imposible para mi, más que como hombre, o mejor, como ser humano, callarme al leer estas reflexiones. No, no puedo, tengo que hablar.
Y tengo que hablar porque sencillamente, duele. Muchos nos llenamos la boca diciendo que este país avanza o no avanza, pero nuestra cultura, sigue ahí, indómita, sin que nadie la aborde; ¿Quieren un ejemplo? A menos de una cuadra de mi casa, a esta hora, una chica de unos 17 años se está prostituyendo; y antes de hablar de "Si ella deja que hagan con su c... un florero", debo recordar que si eso es así es porque alguien está dispuesto a pagar por sexo.
Y es que vivimos en una Sociedad machista, una Sociedad que no valora a la mujer por sus contribuciones, por su entrega al trabajo, al estudio, a nada, sino porque llene una copa C de sostén, porque satisfaga la vista del hombre y su pene, y porque se repliegue al trabajo doméstico. ¿Saben lo que duele? El ver lo que muchas mujeres hacen por todos y cada uno de nosotros. Tengo miles de fallas en todo, lo sé bastante bien; pero ¿acaso no he visto a mi mamá desvivirse por mi?, ¿acaso no veo a mi novia levantarse todos los días a las 5 de la mañana? Claro que lo veo. Y me duele que esta sociedad no lo vea y sólo vea sus exterioridades. Hasta hace muy poco, una chica en El Salvador agonizó hasta la semana 20 de embarazo, puesto que padecía de lupus, la enfermedad la consumía y el feto venía sin cerebro... No pudo abortar, y le tocó esperar a la semana 20 de embarazo para no abortar y llamar a su suplicio un parto prematuro; cosa que no me extraña de la mentalidad retrógrada de los que profesan la Religión Católica, pero ahora, yo me pregunto, ¿cuál hubiera sido la suerte de ella en Venezuela? ¿Sabían ustedes que nuestra Constitución, amada y querida, a pesar de la grosera influencia de la Iglesia establece una disposición ambigua en estos menesteres (Art. 76 CRBV)? ¿Y en qué manos dejaríamos un caso de semejante envergadura? ¡En las manos de la retrógrada MUY MODERNA SALA CONSTITUCIONAL DEL TSJ! La misma que le dijo NO a Támara Adrián cuando ella quiso hacer valer su derecho al libre desenvolvimiento de la personalidad usando "Támara" como nombre de pila. (No estoy de acuerdo con la Profesora Tamara en lo político, pero esta fue la Oportunidad que tuvo la Sala de exhibir la auténtica JUSTICIA REVOLUCIONARIA).
¿Saben por qué me duele esto en especial? Porque casi toda mi familia, la componen mujeres, al igual que mis amistades más cercanas, sin contar a mi novia y a su familia, a quienes amo profundamente... No creo que nadie deba imponerse sobre nadie por el hecho de que posea un pene o una vagina, es una razón para crear el culto a la estupidez... Sólo pienso que actuemos concordantemente a un principio de nuestra propia Constitución, algo que ni la retrógrada Iglesia nos pudo quitar. ¡TODOS SOMOS IGUALES Y SE DEBE ACTUAR EN CONSECUENCIA! Yo nunca me había puesto, hasta hoy; a pensar, sobre lo difícil que significa ser mujer en este país, y en muchos. Pero caer en cuenta ante las pequeñas cosas que hacemos, me hace sentir, a mi, como basura. Porque es que todos, con o sin mala intención, hemos caído en esa violencia que las mujeres adolecen a diario... Hemos hecho cosas en nombre de la hombría, y esa hombría la hemos convertido en la capacidad de pasar coleto con las mujeres. Estoy cansado de escuchar frases como:
Si no tienes muchas mujeres, no eres hombre
Si no haces fuck'n'go, no eres hombre (Fuck'n'go: Coger y largarte, dicho de una manera más bonita)
La infidelidad no es una decisión, es una oportunidad
Un tipo es el que a los 25 años, lleva n mujeres entre sus piernas.
Y esas frases no sólo las dicen hombres, hay mujeres que replican estos avatares. En una discusión que tuvimos en la Escuela de Derecho sobre la Infidelidad, una compañera de clases llegó a decir que sólo los hombres tenían derecho a ser infieles. Decir algo así, me llevó a los tiempos en los que los Teóricos del Derecho y la Filosofía lanzaban perlas como Solamente los ungidos por Dios, son los destinados al Gobierno de las Naciones, el cual será dirigido ilimitadamente por estos. Al ver cosas así, más que indignarme, me doy cuenta de que el problema de este país, es profundamente cultural y educacional, porque, ¿quién se supone que facilita esta suerte de status quo? Las familias. Familias que no sólo educan con el conductismo, la crianza, sino con el seguimiento de patrones, el ejemplo. Por esto, es que no me sorprende que cada generación viva más rápidamente que la otra, y que, por consecuencia, termine quemando etapas al punto de llegar a los 30-40 años de edad pretendiendo actuar cual adolescente, a fín de ocultar su desilusión por no haber hecho todo lo que hubiera querido hacer en esa época. Debemos, pues, todos los seres humanos sin ningún distingo, el preocuparnos por buscar esa igualdad tan merecida y consagrada en los textos legales. Dejarnos de jugar este frenetismo en el que nos arropa esta modernidad, y simplemente ser personas y vivir. No es muy difícil, sólo hay que ver, qué nos molestaría a nosotros, si nosotros fueramos mujeres...
Por un mundo donde seamos socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres"Rosa Luxemburgo.
Por cierto, no había caído en que hoy, 4 de junio, se cumple el 183 aniversario de la muerte del Mariscal Antonio José de Sucre. Honor y gloria a quien lo merece.
Los dejo con la canción que suelen acompañar mis entradas de blog, esta vez es I'll be there de Megumi Hayashibara. Dedicada a todas las mujeres que sufren en silencio con un sistema que es cada día más inhumano. Buenas noches y buena suerte.
